jueves, 10 de diciembre de 2015

EL NUEVO TESTAMENTO. ¿ESCRITO POR DIOS O POR HOMBRES?




XV.- Los evangelios y el origen del Nuevo Testamento 
Autor: Rafael Camacho Monter

      Para iniciar este estudio, y por la temática central de este artículo, es importante reflexionar antes que nada, en ejemplos de acontecimientos que ocurrieron en la vida de Jesús, relatados en distinta forma por los evangelistas. Leamos lo siguiente:Cuando llegó a la otra orilla, a la tierra de los gadarenos, vinieron a su encuentro dos endemoniados que salían de los sepulcros, feroces en gran manera, tanto que nadie podía pasar por aquel camino.Mat. 8:28. Ahora leamos otro pasaje con el mismo suceso: Vinieron al otro lado del mar, a la región de los gadarenos. Y cuando salió él de la barca, en seguida vino a su encuentro, de los sepulcros, un hombre con un espíritu inmundo, que tenía su morada en los sepulcros, y nadie podía atarle, ni aun con cadenas. Mrc. 5:1-3. Lucas narra que también era un solo endemoniado al que exorciza Jesús. ¿A quién le creemos? Mateo fue discípulo de Jesús y fue testigo de estos hechos. Lucas y Marcos fueron convertidos al cristianismo tiempo después de la muerte de Jesús. ¿A ellos les dictó el Espíritu Santo para que escribieran su evangelio? Veamos otro ejemplo: Al salir ellos de Jericó, le seguía una gran multitud. Y dos ciegos que estaban sentados junto al camino, cuando oyeron que Jesús pasaba, clamaron, diciendo: ¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de nosotros! Mat. 20:29,30àhasta el 34. Ahora comparemos la versión de Lucas: Aconteció que acercándose Jesús a Jericó, un ciego estaba sentado junto al camino mendigando; y al oír a la multitud que pasaba, preguntó qué era aquello. Y le dijeron que pasaba Jesús nazareno. Entonces dio voces, diciendo: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí! Luc. 18:35-38.

      No son dos casos distintos, estamos hablando de la única llegada de Jesús y sus discípulos a Jericó, donde Jesús hizo varios milagros. Aunque Mateo dice que “salían”. Marcos, incluso, relata que este ciego se llamaba Bartimeo (Mrc. 10:46). Es común leer en varios relatos de Mateo que habla de dos personajes, mientras que Marcos y Lucas solamente mencionan uno. Otro ejemplo: el día de la resurrección de Jesucristo, cuando van las mujeres al sepulcro, no encuentran a Jesús, pero les aparece uno o dos ángeles ¿cuántos ángeles vieron estas mujeres? En este caso Mateo menciona uno (28:2), Marcos también uno (16:5) y Lucas menciona dos (24:4); Juan, por su parte, relata la presencia de dos ángeles (20:12). Esta disparidad entre los evangelistas es fiel reflejo de la labor e investigación de cada evangelista como hombre común, y muy lejos de la posibilidad que estos escritos hayan sido dictados por alguna esencia divina. Más adelante veremos más ejemplos similares.

      El estudio al que ahora mismo nos vamos a introducir, sonará grave ante la ligera observación, por lo cual les recomiendo se profundicen en el análisis de lo que muestra el texto bíblico, para que capten lo que realmente estoy intentando declarar. ¡Hey, fuera fanatismo! à Luego de un hermético análisis en el texto griego, bajo el sistema de investigación y exploración profunda que nos obliga el pragmatismo bíblico; movimiento al cual los invito a participar. Apoyado estrictamente en el Nuevo Testamento griego, para evitar posibles errores de las traducciones de las Biblias contemporáneas, he logrado descubrir datos importantísimos, que muy pocos se atreven a declarar. Gracias a Dios estamos ya muy lejos de la Inquisición del clero católico, que perseguía a los herejes hasta llevarlos a la hoguera y quemarlos vivos, aunque a los tales herejes les asistiera la razón bíblica. Gracias a mi Dios, hoy puedo expresar libremente lo que tanto he estudiado, y ahora quiero compartir mis investigaciones con todos ustedes, me gustaría muchísimo recibir también vuestras opiniones. Y bueno, cuando lean el título de estos temas, quizá pase en su mente alguna idea negativa hacia mí; no se preocupen, es normal, únicamente les sugiero que me juzguen hasta que terminen de leer los artículos. No olviden mi recomendación, en este estudio mantengan mente abierta. Se resistirán a creer lo que van a leer, pero es totalmente cierto; los invito a descubrirlo. No actuemos como hipnotizados por el fanatismo religioso, es preciso dejar de soñar y poner los ojos en la realidad de las cosas y no en la ilusión mística del pensamiento.

En el N. T., muy poco fue escrito bajo inspiración del Espíritu Santo:
       Por el hecho que Pablo le dijo a Timoteo: Toda Escritura es inspirada divinamente… 2ª. Tim. 3:16. Ya, por eso, nos enclaustramos en la frase, y fanáticamente encerramos en nuestra conciencia cada una de las palabras de la Biblia, y las consideramos totalmente divinas. Pero hermanos, actuando de este modo, lo único que mostramos es ignorancia y cerrazón. Es claro que no han alcanzado a comprender el verdadero mensaje. Cuando Pablo le dijo estas cosas a Timoteo no existía aún el Nuevo Testamento, ni siquiera pasaba por la mente de Pablo, que algunos siglos después de su muerte, existiría un libro que se llamaría así. Siendo él el autor de casi el 50% del contenido del NT, jamás tuvo en sus manos ese libro. Pablo no hablaba del N T sino del Tanaj (Antiguo Testamento en hebreo), o bien, de la Septuaginta (traducción griega del Tanaj) que estaba muy de moda en esa época, tomándose como origen divino únicamente lo escrito en la ley, en los salmos y en los profetas (Lucas 24:44). Entenderás mejor si lees en tu Biblia los textos.

       La confección del NT se hizo hasta fines del siglo IV por miembros del clero católico en Roma, los cuales recopilaron los fragmentos de escritos evangélicos y apostólicos y los pergaminos de Patmos, los reunieron y fueron traducidos al latín. Todo empezó a principios del siglo II, cuando Ireneo de Lyon, seleccionó de entre todos los evangelios existentes, los cuatro que ahora mismo tenemos en nuestras Biblias, apartando los demás, y calificándolos de apócrifos. Ireneo fue discípulo de Policarpo, uno de los más aventajados discípulos del apóstol Juan. En la era apostólica, los cristianos de entonces se valían de pergaminos existentes en esa época (2ª. Tim. 4:13), así como de la Septuaginta (A T griego) y de ciertos evangelios, incluyendo los que conocemos. Para el año 325, cuando nace el catolicismo romano, cuando Constantino I organiza al cristianismo y lo impone como religión de estado, todavía no existía el N Ten su conjunto. No fue sino hasta el año 367, que el patriarca de la iglesia griega, Atanasio, obispo de Alejandría, en una epístola designó 26 libros (no en orden) que componen el NT, declarando apócrifa cualquier obra posterior a las escritas del primer siglo; dudándolo mucho, finalmente es aceptado el libro 27: Apocalipsis. Y no fue sino hasta el año 494, que el papa ßGelasio I decretó el canon del Nuevo Testamento, organizando el orden de los libros, desde Mateo hasta Apocalipsis, tal como están hasta el día de hoy.

       Mira nada más cómo son las cosas; lo que encierra el enajenamiento del fanatismo, si el obispo católico Atanasio, hubiese aceptado como legítima la epístola de Clemente, quien desde Roma les escribiera a los corintios; todos los actuales creyentes de cualquier denominación evangélica la aceptarían, pero decimos que es apócrifa, porque un obispo católico lo decretó... ¿Se dan cuenta? Esta epístola existe aún en nuestros días, como existen otros manuscritos evangélicos considerados apócrifos. Evangelios existieron muchos, no tengo la cifra, pero fueron muchos los escritores de evangelios: Tomás, Judas Tadeo, Santiago, otro Mateo, Pedro, Felipe, etc. Muchos de estos se conservan hasta el día de hoy. Esto también lo cuentan libros de Historia Eclesiástica; pero coincide, y me basta, con lo que puedes leer en Lucas 1:1 que dice:Puesto que muchoshan tratado de poner en orden la historia de las cosas… Si el NT fue elaborado por el Clero Católico (la intendencia vaticana), cuatro siglos y medio después que Pablo profiriese la frase>Toda Escritura es inspirada divinamente…. ¿Entonces a que Escritura se refirió Pablo? R.= Creo que es bastante entendible que Pablo se refirió a las escrituras de los profetas del A T. Los judíos llaman Escrituras del Tanaj al Antiguo Testamento; en plural “Escrituras”, pues lo dividen en tres partes: תּוֹרָהTorá las Escrituras de la Torá (Pentateuco o libro de la ley); כְּתוּבִים, Ketuvim «Escritos» estos son los escritos históricos y poéticos (Salmos, Proverbios, Job, Cantares, Ruth, Lamentaciones, Ester, etc.); y a las Escrituras a las cuales se refirió Pablo: Los Nevi'im (del hebreoנְבִיאִים, «Profetas»):

       Y al que puede fortalecerlos según mi evangelio y la predicación de Jesucristo, según la revelación del misterio que se ha mantenido oculto desde tiempos eternos, pero que ha sido manifestado ahora, y que por las Escrituras de los profetas, según el mandamiento del Dios eterno, se ha dado a conocer a todas las gentes para que obedezcan a la fe. Rom. 16:25,26.>>A las Escrituras de los Nevi’im נְבִיאִים

       ¿Captaron ya a qué Escritura se refirió Pablo cuando hablaba de las Escrituras? ¡Claro! A las Escrituras de los profetas. Pablo no pudo referirse a un libro que todavía no existía. Fue en el siglo XVI tras la Reforma Protestante, que influenciado por el luteranismo, y emocionado por el Nuevo Testamento de Juan Pérez de Pineda, el monje jerónimo, Casiodoro de Reina, español, elaboró una Biblia castellana, eliminando los libros considerados apócrifos (Tobías, Judith, Macabeos, Sabiduría, Baruc, etc.), del Antiguo Testamento, y fue publicada en 1562. A esta versión le llamaron Biblia Protestante, pero todos sabemos que esta Biblia cuya traducción fue perfeccionada a principios del siglo XVII por Cipriano de Valera, tiene cierto origen católico y luterano. Afortunadamente, gracias a Dios podemos contar con copias del texto griego e investigar directamente a fondo cada una de sus palabras, y alcanzar un más exacto entendimiento de lo que nos quieren decir las Escrituras del Nuevo Testamento.

No todo lo escrito en la Biblia es de procedencia divina.Increíble, pero cierto. Únicamente un 5% de cristianos está convencido que los evangelios y demás cartas del Nuevo Testamento fueron hechos por disposición humana, a excepción del Apocalipsis, la revelación de Elohim que le dio a Jesucristo para que la revelara a Juan por medio de su ángel (Apoc. 1:1); y del Antiguo Testamento los libros proféticos, así como la ley dictada a Moisés y los salmos. Repito: àCon excepción del Apocalipsis, los demás escritos del Nuevo Testamento fueron hechos bajo el libre albedrío de sus escritores. La inmensa mayoría de los hermanos se confunden por la frase: “Toda Escritura es inspirada divinamente…”. Suena lógico entonces atribuirle divinidad a todos los escritos bíblicos. Esta misma postura toma la iglesia católica. Yo no dudo, que el Espíritu Santo de Elohim haya motivado a aquellos hombres a investigar, quizá desvelándose, escribiendo bajo la luz de una antorcha, qué sé yo. Tenemos muchos libros históricos: Josué, Samuel, Reyes y Crónicas, Ruth, Esdras, Esther, Nehemías, los evangelios, Hechos, etc.

       Quiero ser más explícito: No estoy diciendo que la doctrina que ofrecen las epístolas apostólicas sea de carácter e invención humanos, no es por ahí, no se confundan. Pero por ejemplo, comparemos cualquier epístola con el majestuoso libro de Apocalipsis… Nada qué ver. En las epístolas se leen frases tales como: Alejandro el calderero me ha causado muchos males: \\ Trae cuando vengas, el capote que dejé en Troas, en casa de Carpo: y los libros, especialmente los pergaminos…\\ Yo Tercio, que escribí la epístola, os saludo en el Señor.… \\Erasto se quedó en Corinto: y a Trófimo dejé enfermo en Mileto…\\ Les saluda Gayo, mi huésped, y de toda la iglesia…\\ Les saluda la iglesia que está en Babilonia…\\ He escrito a la iglesia; pero Diótrefes, quien ambiciona ser el primero entre ellos, no nos admite.¿Estas frases fueron dictadas por el Espíritu Santo? Considero que no estoy predicando a niños de kínder garden, sino a personas de definido intelecto.

Ahora compara estas frases: El ángel me dijo: “Escribe: ‘¡Dichosos los que han sido convidados a la cena de las bodas del Cordero!' Y añadió: “Estas son las palabras verdaderas de Dios”.Apoc. 19:9. Nada qué ver…Observa: “Trae cuando vengas el capote que dejé en Troas…” ¿Qué te dice esta frase? Esto no es un dictado divino, ¡caramba! Es una carta común, donde Pablo le encarga a Timoteo que cuando fuese a verlo a Roma le llevase el capote y los libros que dejó en Troas con el hermano Carpo. Así de sencillo. Es como cuando la esposa nos habla al celular: “Mi amor, cuando salgas de la chamba no olvides pasar a la tienda por tomate y de una vez te traes las tortillas. (En México “chamba” significa “trabajo”).

       ¿Quién dictó a quién? Tampoco en el caso de la epístola a los Romanos es el Espíritu Santo dictándole a Pablo; fue Pablo dictándole al hermano Tercio (Rom. 16:22) “Yo Tercio, que escribí la epístola, les saludo en el Señor”. Todo parece indicar que Pablo no escribía las epístolas, sino que las dictaba para que otro las escribiera, ¿por qué? Nadie lo sabe… yo creo (idea personal), que Pablo precisaba algún hermano que tuviese buena calidad de escritura griega, lo que llamamos “bonita letra”, aunque también podría ser que Pablo ya tenía problemas con su vista y le era difícil escribir. Ya al final de ellas, Pablo las firmaba de su propia mano, anotando algunas cosas breves. (1ª. Cor. 16:21; La salutación de mí, Pablo, de mi mano. Parece ser notoria la diferencia de letras que aparecían en las epístolas, entre el verdadero escritor y el saludo o firma final de Pablo; considera Gál. 6:11 que dice: “Mirad con cuán grandes letras les escribo de mi propia mano”. Consideren también Col. 4:18; 2ª. Tes. 3:17; Filemón 1:19).

       El fanatismo es un síndrome muy dañino y perjudicial, porque bloquea al que lo posee y le resta oportunidad de crecer y desarrollar su conocimiento; actuando de forma tan cerrada, lo único que se hace es mostrar ignorancia. Si posees cualidades fanáticas, elimínalas de ti, no sirven para nada. Las historias (los evangelios son historia) y las epístolas no fueron dictadas por el Espíritu Santo. Posiblemente Samuel escribió la historia de Ruth, o quizá Booz, en realidad no se sabe, pero esta historia no fue dictada por el Espíritu Santo. Es historia, simple. El libro de Josué, por ejemplo, aunque fue semi-corregido por los deuteronomistas, no obstante contiene ciertos errores de casos históricos y geográficos. No nos meteremos en profundidades sobre estos casos, investiguen. Para muchos de ustedes que desconocen estas cosas, se les hará difícil comprenderlo, me conforta saber que existen también muchos eruditos y estudiantes de la Biblia que están totalmente de acuerdo conmigo. Sólo la profecía es de procedencia divina. Pedro nos explica que…:

Porque la profecía no fue en los tiempos pasados traída por voluntad humana; mas los santos hombres de Dios hablaron, siendo inspirados del Espíritu Santo.2ª. Ped. 1:21

       Pedro individualiza a la profecía bajo inspiración del Espíritu Santo. Pablo en sus epístolas nos enseña la doctrina que recibió de Jesús. En sus personales escritos nos muestra la sabiduría que le fue dada por el Señor; pero de ahí que especulemos que todos los hechos históricos y epístolas se escribieron bajo un dictado divino del Espíritu Santo, es un error. Podemos ver y aceptar, que los apóstoles estaban llenos del Espíritu Santo, y llenos del Espíritu Santo hablaban, llenos del Espíritu Santo sanaban enfermos, Pablo sanaba enfermos incluso con telas que hubiesen sido tocadas por él, y luego llevadas a los enfermos, y estos sanaban (Hch. 2:43; 19:12). Por su parte Pedro, sanaba enfermos con su sola sombra (Hch. 5:15), pero esto no los transformaba en seres no humanos (Rom. 7:21-25). ¿Qué sucedió con Pedro?, si éste era un hombre lleno del Espíritu Santo, ¿por qué fue reprendido por Pablo? Lee Gál. 2:11-15. ¿Por qué un hombre lleno del Espíritu Santo actuaba de esa manera tan hipócrita? Sus epístolas son importantísimas y sagradas, pero prescritas de su propio conocimiento, como el pastor que le escribe una carta llena de recomendaciones y enseñanzas a alguna iglesia de su estado o de su nación. La primera carta de Pedro fue escrita por Silvano, hasta el capítulo 5:11, luego, desde el siguiente verso 12, y hasta el final,
 es redacción de Pedro (1ª. Ped. 5:12), observa que el amén del verso 11 es de Silvano, mientras que el amén del texto final es de Pedro. La segunda carta la escribe totalmente el propio Pedro (2ª. Pedro 3:1).

Agregado: o como los escritos que te envío Marisol, ¿acaso escribo yo por obra del Espíritu Santo de Elohim? Y qué tal si dentro de tres siglos algún “importante” católico los descubre y los canoniza, ¿no diría el mundo que fueron inspiración divina de San Rafael? La Epístola de San Rafa, jejeje.

       Pablo era un hombre normal, como cualquiera de nosotros; escribió en sus cartas la doctrina recibida de Jesús por revelación o por visión: …mas vendré a las visiones y a las revelaciones del Señor. 2ª. Cor. 12:1, 7-9; Gál. 1:12. Y de ello escribió en sus epístolas. Escrito o hablado, es lo mismo, ¿no intuyes cuantas cosas habrán sido predicadas oralmente por Pablo a lo largo de su carrera, las cuales desconocemos por no haber sido escritas?: Lo que somos en palabra por carta cuando estamos ausentes,lo mismo seremos también en hechos cuando estemos presentes. Sin embargo, algunos corintios no veían a Pablo como alguien importante: Porque dicen: "Aunque sus cartas son duras y fuertes, su presencia física es débil, y su palabra despreciable". El texto parece aludir otras cartas las cuales no conocemos. Lean 2ª. Cor. 10:7-11. No se confundan, la sabiduría que tenía Pablo con la que predicaba personalmente (verbalmente) o por cartas, era provista por el poder de Dios en revelaciones y visiones:

       Y ni mi palabra ni mi predicación fueron con palabras persuasivas de humana sabiduría, mas con demostración del Espíritu y de poder; Para que vuestra fe no esté fundada en sabiduría de hombres, sino en el poder de Dios.1ª. Cor. 2:4,5. En visiones o en revelaciones, Pablo recibía las enseñanzas de Jesucristo, luego las predicaba verbalmente o las escribía para que sirvieran de enseñanza a las iglesias. Sin embargo, también en sus epístolas dijo esto: Lo que hablo, no lo hablo según el Señor, sino como en locura, con esta confianza de gloria.\\\ 2ª. Cor. 11:17. ¿Son ministros de Cristo? (Hablo como si estuviera loco.) Yo más; en trabajos, más abundante; en azotes…2ª. Cor. 11:23. \\\ Pero a los demás digo yo, no el Señor, que si un hermano tiene una mujer que no es creyente, y ella consiente en vivir con él, no la abandone.1ª. Cor. 7:12. \\\ En cuanto a las doncellas no tengo mandamiento del Señor, pero doy mi opinión como el que habiendo recibido la misericordia del Señor es digno de confianza. 1ª. Cor. 7:25. En estos versículos se observa mucho el sentir propio de Pablo. Sus expresiones personales, sus opiniones y libertad de decisión “digo yo, no el Señor.

       Los apóstoles escribieron sus mensajes y exhortaciones por su propia voluntad y libertad: Observa con detenimiento: Teniendo muchas cosas qué escribirles, no quise hacerlo mediante papel y tinta, pues espero ir a ustedes y hablarles personalmente, para que nuestro gozo sea cumplido. 2ª Juan 1:12. ¿Por qué no quiso seguir escribiendo Juan si es que el Espíritu Santo dirigía su epístola? Esto nos demuestra que no era el Espíritu Santo dirigiendo la escritura de Juan en esta carta. La frase “no quise hacerlo” nos demuestra voluntad y decisión propias. Tuve la intención de escribirte más cosas, pero me arrepentí, no quise hacerlo, porque prefiero decírtelo personalmente. La mejor prueba de esto, Lucas: no era profeta. Él escribió su evangelio y la historia de los apóstoles, investigando por su propia voluntad. Desglosemos las frases más contundentes del siguiente texto de Lucas de la traducción griego-castellano. Compáralo con tu Biblia:

       Puesto que ya muchos han tratado de poner en orden la historia de las cosas que entre nosotros han sido ciertísimas…ààtal como nos las enseñaronßßlos que desde el principio las vieron con sus ojos y fueron ministros de la palabra…àme ha parecido también a míàdespués de haber investigado con gran esmero todas las cosas desde su origen, escribírtelas por orden, excelentísimo Teófilo. Lucas 1:1-3.

       Tal como nos las enseñaron los que vieron con sus propios ojos. Lucas escribió de lo que le comentaron los testigos presenciales de los hechos, además de sus propias investigaciones.à Después de haber investigado todo…y entonces es que se dispone a escribirle a Teófilo. Este último término es παρηκολουθηκότιparekoloithzecoti. Literalmente: habiendo investigado. Con esto Lucas expresa que anduvo investigando los hechos desde su inicio. Y muy cierto, Lucas es el único que habla de los padres de Juan bautista: Zacarías; lo del ángel Gabriel y que Zacarías quedó mudo; de Elizabeth, de su embarazo y el salto de su bebé al recibir a María. El único que habla del niño Jesús (12 años). Es muy probable que estos hechos los escuchara directamente de los labios de la propia María. Porque si fuese verdad que todo esto se lo dictó el Espíritu Santo, no veo entonces por qué Lucas presuma diciendo que anduvo investigando. El Espíritu Santo es un Espíritu perfecto, de seguridad y no de aproximación. En algunos versículos del evangelio de Lucas vemos escritura imperfecta.

       Cuenta Lucas (cap. 9) que estando Jesús en una zona apartada de Betsaida (vso. 10), hasta donde le siguió la multitud, Jesús predica un hermoso y elocuente sermón a las gentes que se habían reunido diciéndoles: Pero les digo en verdad, que hay algunos de los que están aquí, que no gustarán la muerte hasta que vean el reino de Dios. Con estas palabras termina Jesús el sermón. Lee desde el versículo 22 el sermón completo. Lucas no nos relata qué hizo Jesús los siguientes días, sólo dice que…: Y sobrevino como ocho días después de estas palabras, que tomó a Pedro y a Juan y a Jacobo, y subió al monte a orar. Lucas 9:27, 28.

       Lucas no estaba seguro en la exacta cantidad de días… o… ¿será justo pensar que es el Espíritu Santo el que no se acordaba cuántos días habían pasado desde el Sermón de Cristo hasta su transfiguración en el monte? No mis hermanos, esta sólo es una prueba irrefutable que, humanamente, Lucas en sus investigaciones no encontró el dato exacto, y no nos asegura con exactitud cuántos días pasaron desde el sermón hasta el día que Jesús se transfiguró. Sólo dice que como ocho días después de su sermón a sus discípulos (Luc. 9:23-27; Mat. 16:24-28). Pudieron haber sido siete, nueve, diez días. Mateo en cambio, dice que fueron seis días después (Mat. 17:1), cuando el Señor se transfigura. ¿Cuál de estos dos discípulos dijo la verdad? Sé que debemos respetar todo escrito, pero uno de los dos no dijo la verdad o no investigó bien. Mi celo por defender la perfección del Espíritu Santo, me hace rebelarme a creer como divino todo lo escrito: no es posible que el Espíritu Santo le haya mencionado a Lucas ocho días y a Mateo seis. Simplemente  N O E S    P O S I B L E.

       Lucas habla de la hija de Jairo, diciendo que era una niña como de doce años. Igual pudo haber sido mayor o menor. Asimismo, en muchos de los casos cuando se trataba de contar a las gentes, en sus investigaciones Lucas no consiguió los datos exactos, como el caso de los que estaban en el aposento alto. Nosotros decimos que eran justo ciento veinte almas, pero Lucas no aseguró tal cantidad, dijo que eran como ciento veinte (Hch. 1:15), a lo mejor eran menos, o más. Luego los convertidos y bautizados en Pentecostés comotres mil (Hch. 2:41); más adelante de los que oyeron la palabra se convirtieron como cinco mil (Hch. 4:4, lee también 5:36).  Tenemos también cuando Pablo en Éfeso bautiza varios hombres. Lucas escribe que: Y eran en todos como unos doce hombres.Hechos 19:7. ¿Por qué Lucas no proporcionó datos exactos? R.= Porque en sus investigaciones, Lucas no recibió de sus informantes los datos exactos. Los bautizados por Pablo en Éfeso pudieron haber sido diez, once o trece. El único dato exacto de personas que anotó Lucas en sus escritos fue…: Y éramos todas las personas en la nave doscientas setenta y seis.Hch. 27:37. ¿Sabes por qué este dato sí lo anotó exacto? Porque él viajaba junto con Pablo en esa ocasión, el verbo éramos lo confirma, es obvio que contó a las personas para anotar el dato exacto. De no haber sido así, hubiera escrito que eran como trescientas las personas que iban en ese barco. Esto demuestra que las anotaciones de Lucas, como él mismo lo dijo, fueron impresas luego del resultado de sus propias investigaciones, para plasmar la historia de la vida de Jesús y los apóstoles.

      Grandiosa obra la de Lucas, sin duda alguna. No es evidente que Lucas hubiese recibido información de parte de algún ser divino o celestial, como en el caso de Juan en la isla de Patmos. Sólo es una fantasiosa ilusión que nos proporciona la falsa idea que ha sido incrustada en nuestra conciencia, hermanos, el Espíritu Santo no actúa caprichosamente así como se imaginan. Y bueno, a los que predican… si el Espíritu Santo pone palabras en su boca, ¿por qué cuando se paran en el púlpito o en el atril, llevan ya previamente elaborado el bosquejo de su tema para que no se les olviden los textos? ¿No confían en el Espíritu Santo quien les recordará todas las cosas, o no confían en su memoria? ¿Para qué estudias el tema que vas a ir a predicar a la iglesia en “San Martín de los Nopales”, si el que te va a guiar es el Espíritu Santo? No hermanos, no se equivoquen, el Espíritu Santono actúa así.Las epístolas de los apóstoles fueron cartas comunes, escritas por decisión propia.   A lo largo de la carrera apostólica de Pablo, escribió cartas a diversas iglesias, y a algunos de sus coadjutores, simple. Es el ser humano, el creyente, el fanático, el que las ha matizado como divinas, ¿no es esto idolatría? No digo que sea idolatría intencional; es más bien falta de entendimiento. Las cartas, por más santo que sea quien las escribe no son divinas, sino humanas (por favor lee 2ª. Cor. 10:8-11).No digo lo mismo de los escritos proféticos, aunque aclaro: de origen divino es el contenido, no el profeta: Inspirado es, por ejemplo, el contenido del libro Apocalipsis, no Juan, puesto que el hombre es hecho menor incluso que los ángeles (Salmos 8:4,5), y ni aún los ángeles son considerados seres divinos (Apoc. 19:10; 22:8,9). …yo soy consiervo tuyo… adora a Dios.

       Estoy consciente que todas estas frases por mí expresadas se prestan a ser tomadas como la blasfemia de un loco. Tranquilos, no preparen la hoguera todavía, primero les explico: Es fácil. No creo ni puedo aceptar que el Espíritu Santo sea informal o voluble, dictando a Mateo un suceso de un modo, y a Marcos el mismo suceso, pero con detalles diferentes. Hay pasajes entre los evangelistas que si bien son narrados de modo diferente, te proporcionan la misma idea. Entiendes lo mismo; pero cuando lees, por ejemplo en Mateo, que Jairo le dice a Jesús: “Mi hija acaba de morir”. Luego lees en Marcos que Jairo le dice a Jesús: “Mi hija está agonizando”.¡¿Eh?! ¿Acaba de morir o está agonizando? (Mat. 9:18 y Mrc. 5:23). Los dos anteriores textos están hablando del mismo suceso, es el mismo Jairo y la misma hija; la diferencia, que para Mateo la hija de Jairo ya había muerto, mientras que para Marcos, la hija de Jairo apenas estaba agonizando. Por lo pronto, nos quedamos con la duda, cuál de los dos dijo la verdad.

       ¿Cuál de los dos escribió la realidad de las cosas? O es que ¿el Espíritu Santo a Mateo le dictó una cosa y a Marcos otra? No puede ser, ¿verdad? Otro ejemplo: Luego del sábado, María Magdalena, María, la madre de Jacobo, y Salomé, compraron especias aromáticas para ir a ungirle. Y muy de mañana, el primer día de la semana, llegaron al sepulcro cuando el sol ya había salido. Mrc. 16:2. Tras la muerte de Jesús, dice Marcos que las mujeres fueron al sepulcro de Jesús, con el propósito de ungir su cadáver, y que esto lo hicieron muy de mañana, ya salido el sol. \\\ Ahora bien, nos sorprendemos que al leer el evangelio de Juan 20:1, nos dice: El primer día de la semana,María Magdalena fue de mañana, siendo aún oscuro,al sepulcro, y vio quitada la piedra del sepulcro.¡Por fin! ¿Estaba aún oscuro, o ya había salido el sol? Y existen más pasajes evangélicos de esta misma naturaleza. Por lo pronto nos quedaremos con la duda del momento exacto en que las mujeres fueron al sepulcro, si era la oscura madrugada del domingo, o minutos después de haber salido el sol. No es posible aceptar que el Espíritu Santo a un evangelista le haya dictado un suceso de un modo, y a otro le hubiese dictado el mismo suceso totalmente diferente. El Espíritu Santo es perfecto. Un último ejemplo (aunque hay muchos más): Mateo asegura que los apóstoles, inmediatamente después de haber resucitado Jesús, se fueron a Galilea:Pero sus once discípulos se fueron a Galilea, al monte que Jesús les había señalado.Mat. 28:16. Galilea dista de Jerusalén aproximados 115 kilómetros, que ida y vuelta dan el doble. En aquella época era imposible ir y venir en un solo día. Contrario a lo dicho por Mateo, Lucas afirma que los apóstoles no fueron a Galilea como Mateo declaró. Luego de su resurrección, Jesús les ordena a sus discípulos que…: He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre ustedes; pero quédense ustedes en la ciudad de Jerusalén, hasta que sean investidos de poder desde lo alto. Luc. 24:49.Leyendo Juan 20:19-29, se observa que por lo menos toda esa semana estuvieron los discípulos en Jerusalén. ¿Por qué Mateo afirma que se fueron a Galilea y no menciona su estancia en Jerusalén? ¿Cómo le hacemos aquí para que no haya contradicción? ¡¡¡Claro que Hay Contradicción!!!

       Queramos aceptarlo o no, hay ciertos comentarios en los evangelios que no son armónicos. Estas contradicciones no pueden provenir del Espíritu Santo de Elohim, el cual es un Espíritu de orden y perfección. Los evangelios son resultado de la hermosa dedicación de esos hermanos evangelistas y apóstoles, seres humanos como nosotros, que estuvieron compilando los relatos que de aquí y de allá se decían entre las gentes de las cosas que sucedieron en la vida de Jesús (Luc. 1:1-3). Así como los relatos de las propias vivencias de Juan: Y el que lo ha visto ha dado testimonio, y su testimonio es verdadero; y él sabe que dice la verdad, para que ustedes también crean. Juan 19:35. Este es el discípulo que da testimonio de estas cosas y el que escribió esto, y sabemos que su testimonio es verdadero. Juan 21:24. Pero tuvieron errores; estos desórdenes en los comentarios no pueden ser un dictado divino, sino acción humana; creo que ya está claro y valió la pena ser repetitivo. Me obligo aclararles, que no estoy diciendo que las epístolas y los evangelios, por el hecho de no haber sido redactados bajo el Espíritu Santo no tengan ningún valor ni sean importantes. ¡Claro que son importantes, y valiosísimos! En ellos está plasmada gran parte de la doctrina verdadera del evangelio de Jesucristo. Sin ellos no tendríamos eso tan parecido a la doctrina de Cristo; no tengo, ni la más pequeña duda, que Dios y su Espíritu Santo hayan influido en el espíritu del hombre para estimularlo a escribir las historias religiosas; si analizan con detenimiento los textos que les he presentado, van a cerciorarse que existe inmensa actividad humana en los escritos del Nuevo Testamento, con excepción del libro profético Apocalipsis, cuya parte humana sólo está en la participación de Juan como escritor. Que Elohim los bendiga…

Espero que este estudio te haya hecho sonreír, te haya sido útil, y que haya sido de grata lectura, toma sólo lo que consideres de edificación. Espero tus comentarios y preguntas. Paz a ti…

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